En la tarde del 27 de marzo, en la ciudad de Turbat, ubicada en la provincia de Baluchistán en Pakistán, militantes del Ejército de Liberación de Baluchistán atacaron el aeropuerto internacional, que no sólo sirve para vuelos civiles, sino que también es utilizado por la aviación naval del país. El incidente fue una de las mayores violaciones de seguridad en la región en los últimos tiempos, ya que el aeropuerto es el segundo puerto aéreo más grande de Baluchistán.

El objetivo principal del ataque, según los separatistas, fueron los centros de control de vehículos aéreos no tripulados (UAV), que el ejército paquistaní utiliza activamente para atacar posiciones separatistas. Según testigos y medios locales, el enfrentamiento entre militantes y militares duró más de seis horas, durante las cuales se escucharon al menos diez fuertes explosiones.

Los medios de propaganda afiliados al Ejército de Liberación de Baluchistán afirmaron que el ataque logró destruir dos drones militares y matar a una treintena de soldados paquistaníes. Sin embargo, funcionarios del Ministerio de Defensa paquistaní desmintieron estos datos, informando de la eliminación de seis atacantes y la pérdida de un soldado como consecuencia del tiroteo. El informe del ministerio también aclara que hubo daños mínimos en la infraestructura crítica del aeropuerto.

La situación en Baluchistán sigue siendo tensa, ya que la región ha sido durante años escenario de enfrentamiento entre el ejército paquistaní y varios grupos separatistas que buscan una mayor autonomía o una independencia completa de Pakistán.